Argentina capacitó a laboratorios de servicios sanitarios de América
Argentina capacitó a laboratorios de servicios sanitarios de América
Se desarrolló en el Laboratorio Nacional del Senasa, referente en la enfermedad para las organizaciones Mundial de Sanidad Animal y de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura.
Buenos Aires, 9 de agosto de 2016 – Organizado por el Centro Buenos Aires para la Capacitación de los Servicios Veterinarios (Cebasev), entre el 1° y el 5 de agosto pasados, se realizó el VII Curso Interamericano teórico-práctico Técnicas serológicas y moleculares para el diagnóstico de la brucelosis.
El curso se llevó a cabo en el Laboratorio Nacional del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), ubicado en la localidad bonaerense de Martínez, reconocido como referente para brucelosis por las organizaciones Mundial de Sanidad Animal (OIE) y de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Coordinado por la experta para brucelosis del Senasa y reconocida por la OIE, Ana Nicola, fue dictado además por los profesionales del Organismo, Sebastián Elena, Cristina Franco y Juan Carlos Manetti, y del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), Silvio Cravero y Marcos Trangoni.
Durante el curso, profesionales y técnicos de laboratorios de servicios sanitarios de países de América recibieron capacitación en la ejecución y estandarización de las pruebas y reactivos utilizados para el diagnóstico de brucelosis, y profundizaron sus conocimientos en las normas de bioseguridad y aseguramiento de calidad para laboratorios de diagnóstico veterinario sobre la base de los estándares de la OIE.
Estos encuentros permiten fomentar la colaboración y el intercambio científico técnico entre los laboratorios de referencia de la OIE y los laboratorios de diagnóstico veterinario de brucelosis de los países de la región.
El Cebasev es un centro de capacitación y formación continua, reconocido como Centro Colaborador de la OIE y creado en el año 2006 a partir de un acuerdo suscripto entre el Senasa y el INTA, quienes coordinan su funcionamiento.